Esta casa que se “esconde” entre los árboles centenarios, se ubica en un extenso terreno y se extiende casi en su totalidad hacia el interior de la propiedad.

Es una casa diseñada por un reconocido arquitecto que influyó en la arquitectura modernista de Portugal.

La casa está situada a mayor altura que el nivel de la calle y se distribuye en tres plantas, dos de las cuales están por encima del nivel del jardín.

En la planta baja nos recibe un gran recibidor donde se diseña una escalera “de diseño” que nos conduce a la planta superior. Esta pieza estructural es también un elemento decorativo desde el que podemos contemplar una amplia zona de estar con chimenea con un magnífico techo de cristal, que nos hace proyectarnos hacia el jardín, dándonos una enorme sensación de espacio e interacción con la naturaleza. En esta planta se encuentran otras áreas sociales como el comedor, una oficina, la despensa y la cocina.

Siguiendo el acogedor recorrido de las escaleras hasta el piso superior, nos sorprende un balcón con un recorrido interior que nos ofrece una vista panorámica del jardín y del piso inferior. En esta zona privada de la casa se encuentran dos dormitorios con instalación sanitaria completa, revestidos con elegantes mármoles y sanitarios diseñados por el autor del proyecto, además de una suite con terraza lateral y con la misma acabados, incluidos los armarios empotrados que tienen la misma firma.

“Arquitecto de la Escola Superior de Belas-Artes do Porto, Viana de Lima contribuyó en gran medida al desarrollo de la arquitectura modernista en Portugal. Firmó numerosos proyectos de arquitectura y urbanismo y, en 1961, obtuvo, en la «II Muestra de Artes Plásticas» de la FCG, el Gran Premio de Arquitectura y la Medalla de Oro de la Ciudad de Oporto.»